Echemos una mirada a cuáles son los países donde la política ha sido más eficaz para derrotar a la pobreza y a la miseria ; a aquellos que han creado las mejores condiciones de vida para el conjunto de la sociedad. No hay un solo país marxista entre ellos. Los países más avanzados y a los que se supone que debemos mirar son democracias. En el otro lado, los países comunistas han ido desapareciendo, uno tras otro y no por una guerra o una invasión extranjera, sino por la incapacidad total de sus instituciones para satisfacer las ilusiones más elementales de una sociedad.
El primer imperio comunista del mundo, exportador nato de escasez y privaciones para la clase trabajadora y abundancia y variedad para los líderes del partido transformador; la felizmente extinta Unión Soviética. Tras más de setenta años disfrutando de las exquisiteces del paraíso totalitario, se desplomó sola . Se diluyó como un oso con los pies de barro , sin intervención extranjera ; porque ensayo tras ensayo, plan quinquenal tras plan quinquenal ; fue incompetente para crear una sociedad moderna, eficiente y con unos niveles de vida aceptables.
El segundo imperio comunista del mundo, China, dado que no era capaz de ni siquiera alimentar a su propio pueblo, prohibiendo la descendencia de más allá del hijo único porque no se les podía sustentar, teniendo que ser varón porque a las chicas se las eliminaba para evitar su capacidad reproductiva.; de repente, se vuelve capitalista para dar trabajo y bienestar a sus ciudadanos. ¡ Toda la vida condenando el capitalismo por ser la fuente de todos los males y acabar con practicarlo como única solución !. ¡ Vaya ejemplo ¡ . A mí me parece la prueba más contundente y definitiva del fracaso del comunismo.
En este sentido, llevamos más de un siglo en el que los llamados intelectuales han dado más que ejemplo de ceguera política. En primer lugar, por no ver como la realidad estaba muy por encima de las ilusiones del comunismo, contribuyendo así, más que nadie, a devaluar los principios democráticos y a presentar la democracia como la máscara de la explotación y del colonialismo. Algo que la democracia no ha sido nunca. Por lo que pretender alcanzar el paraíso comunista, condujo al final, a construir verdaderos infiernos aquí, en la tierra.
En cambio, la democracia no espera crear paraíso alguno sino un sistema perfectible, que pueda renovarse periódicamente, progresando y combatiendo cada vez con mayor eficacia, todos los grandes problemas que presentan las sociedades modernas : la salud, el trabajo, la educación, etc. Y eso es una realidad que está demostrada con los hechos porque las sociedades más avanzadas y por tanto menos imperfectas, son las sociedades democráticas. Las democracias más imperfectas son siempre preferibles a las dictaduras más perfectas.
Aunque en el mundo de hoy parece que la producción de riqueza se ha convertido en el principal valor, ello está subordinado al principio básico de la democracia como es la participación en los asuntos públicos. Si no se involucra uno en el debate social no tiene luego derecho a quejarse aunque solo sea en el terreno del lenguaje y no hay nada peor que la política para destruir una lengua, a base de frases hechas, incompletas, torticeras, que no expresan la verdad, la realidad. Creo que ese es el campo en el que los intelectuales tendrían un papel importantísimo que desempeñar, aportando ideas sin las cuales una sociedad moderna está condenada a muerte. Y esas ideas deben de proceder de la cultura, que es su gran fuente, su surtidor.
Los eruditos deberían de contribuir y de una manera muy decisiva, al perfeccionamiento de la doctrina democrática y de sus instituciones. Ahora bien, siempre que el pensador diferencie la ficción de la realidad, que puede ser perfecta y es la que nosotros creamos a través de la escritura y de la literatura. En el dominio se puede alcanzar la perfección. Lo que no es trasladable al terreno social y político porque es imposible que para toda una sociedad, los valores sean los mismos; en que estemos todos de acuerdo en qué es lo bello, los grandes avances o el verdadero placer. Estas cosas varían enormemente, según la personalidad o la idiosincrasia de cada uno. En ese campo y a mi parecer, lo fundamental es que haya una gran libertad, en la que cada uno pueda organizar su vida de acuerdo con sus propios valores y sin perjudicar a los demás.
Ahora y en pleno siglo XXI, unos jóvenes cachorros del marxismo-leninismo, recién abandonada la adolescencia y muy nerviosos por su inexperiencia, se aprestan a dirigir en régimen de coalición, el Gobierno de una de las naciones más antiguas del mundo y con una sociedad avanzada en democracia. Se trata de España, forjadora de uno de los Imperios en los que se basa la Historia de la Humanidad y madre de más de una veintena de naciones. A sus problemas actuales se le aplicarán remedios viejos con envoltura de regalo para que retrocedamos al siglo pasado. Así está pasando en Cuba, Venezuela, Nicaragua y Corea del Norte. ¿ Iremos en esa dirección ?.
Como es habitual en ti, muy importantes reflexiones.
El Comunismo, el Marxismo y el Leninismo en general, pero especialmente en Europa, tú lo has explicado muy bien, están fracasados y desterrados desde hace bastantes años, por tanto, España, quiero estar convencido, que no va a ser una excepción -no nos olvidemos que las promesas electorales están para incumplirlas-.
Ninguna dictadura es defendible. Ni la Marxista-Leninista, ni las de ideología contraria, que también existen y son igualmente dictaduras.
Winston Churchill dijo aquello de; «La democracia es el sistema político menos malo».
Tú, lo defines mejor; «Las democracias más imperfectas son siempre preferibles a las dictaduras más perfectas».
En estos tiempos que estamos viviendo en España; con la menos que mediocre clase política que tenemos, con el parlamento convertido en un gran y ridículo circo; ahora más que nunca es cuando debemos de tener muy claro y, quienes peinamos canas, transmitir a nuestra juventud, que la DEMOCRACIA no es el problema -como algunos sectores reaccionarios, muy interesadamente intenta hacer creer-, la DEMOCRACIA es el medio que hace que una sociedad -en este caso España- moderna se le permita vivir en libertad. Teniendo claro tres conceptos; mi libertad acaba cuando invado la tuya, acatamiento de las decisiones de la mayoría y respeto al que piense de forma distintas.
Si todos los que nos consideramos personas sensatas y españoles de bien nos aplicásemos estos principios, otro gallo nos cantaría.
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A esta excelente reflexión solo me queda que aplaudirla. Breve, sencilla y claramente. Gracias por compartirla en este blog y un abrazo, José Antonio.
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Querido Juan Fran, quizás en algún otro artículo anterior, ya expresaba que ojo a lo que se avecina con éstos falsos progres. Por suerte o por desgracia, los que tenemos una edad, ya los conocemos sobradamente. Son comunistas, y estos ya están más pasados y más vistos que el hilo negro, aunque todavía siguen calando en esos sectores que aún no les conocen, al final nada de mártires, cuando se instalen en sus despachos y comiencen a pisar moquetas, se alojarán en sus dachas (galapagares), lo malo es que cuando le cojan el gustito al poder, luego van intentar perpetuarse en el mismo, y aquí incluyo al que no va de comunista pero es primo hermano de ellos. Me estoy refiriendo al Doctor Sánchez. Un abrazo
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¡ Como se notan las canas !. El hecho de haber vivido mucho indica que también se sabe mucho y estos son los mismos perros que hicieron mucho daño a España aunque vengan con distintos collares, por más que se camuflen en otras siglas. Lamentable el comportamiento del partido socialista que ha ido desapareciendo para convertirse en el partido de Pedro Sánchez.
Muchas gracias por tu opinión, Paco. Un abrazo.
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No me gustan en política las palabras que terminan en -ismo: fascismo, comunismo, socialismo, liberalismo, entre otras. Normalmente son palabras que definen ideologías, excluyen; y quienes así se definen y las proclaman, dejan entrever que están en posesión de la verdad, excluyendo al resto. Una verdadera barbaridad, pero es así, y demasiadas veces funciona. No es algo nuevo, del siglo XVIII, cuando la Revolución Francesa definió el Estado moderno, o del XIX con filósofos alemanes Hegel etc y finalmente Marx, no. Ya lo dijo William Shakespeare, algunos siglos antes, en su obra «El rey Lear»: «los locos conducen a los ciegos»….Pues eso, se trata de que hay mucho ciego…y algunos locos–yo diría hoy día golfos– los suficientes para falsear la realidad y que prosiga el engaño,,,un ejemplo palpable lo tenemos en nuestro país, donde la verdadera democracia–la de la separación de poderes y de elecciones representativas, la de Montesquieu– aún no ha llegado ni se le espera….jeje.
Comunismo es un vocablo «demodé», extemporáneo, ya casi no se emplea; normal, visto lo visto con la URSS, que fue el modelo canónico de comunismo. Curioso como el lenguaje fluctúa y evoluciona en función del tiempo en todos los ámbitos, en política también, naturalmente. Ahora se habla de izquierda, incluso ya tampoco; desde la redefinición del comunismo en el foro de Sao Paulo a principios de los 90, se habla de palabras modernas,,,feminismo, medio ambiente, derechos, igualdad, justicia social etc…todo falso (la única justicia que existe es la legal, y la igualdad es un mito estúpido como sabemos), es el mismo perro con distinto collar para seguir engañando a los ciegos, a los que no quieren ver.
Lo que queda en el mundo con el apelativo comunista son, como sabemos, unos pocos países–sobre todo asiáticos– donde la gente pasa hambre, mucha hambre….y mucha represión. Los demás se han disfrazado.
A mí la palabra que me gusta es libertad, y esa ahí sigue. Menos mal.
No nos preocupemos por nuestros «comunistas» ahora tocando poder…son todos comunistas de salón, de hojalata…dan risa..aunque podrían hacer algún daño temporalmente. Me preocupa mas la cantidad de gente que les vota; y por supuesto, los movimientos secesionistas que se pergeñan y aumentan cada día.
Saludos
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Interesante reflexión -como siempre- que comparto casi en su totalidad. A partir de la constitución de este nuevo Gobierno híbrido, se abre una etapa de incertidumbre que no sabemos ni a donde, ni como nos va a ir y eso es .creo. lo peor que le puede ocurrir a España en este momento. Esto pienso que va a ser como un dolor de muelas…. del que espero salgamos pronto.
Muchas gracias por tu comentario, José Manuel. Un abrazo.
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La situación política actual me saca de mis casillas. A tal punto que no quiero ver noticias políticas, porque me enerva. No lo soporto.
Siento vergüenza cuando pienso que pensaran nuestros colegas europeos con líderes políticos que simpatizan con el comunismo y apoyan decisiones de países como venezuela.
Confío en que este «tenderete» se desmonte por la propia falta de entendimiento en pocas semanas por la propia falta de entendimiento entre ellos.
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Has expresado con bastante claridad el sentimiento que tiene media España, incluido el deseo de que esta Legislatura sea lo más breve posible, como si se tratara de un mal resfriado que tenemos que sufrir. Este Gobierno » contra natura » probablemente no traspase el próximo mes de febrero que es cuando se debatirán los Presupuestos Generales del Estado. ¿ Que más concesiones se pueden dar a los separatistas vascos y catalanes que no enfrenten al restos de las Autonomías )…. En fin, esperaremos acontecimientos.
Gracias Leyre por tu comentario. Un beso.
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Vista la Historia del s. XX, parece en efecto que el Comunismo es una ideología creada y puesta en práctica por mentes sádicas, empeñadas a hacer sufrir a la Humanidad en general y al ciudadano en particular. Además, es parcialmente coetánea con otra ideología, como el fascismo (más aún en su versión nazi), que ha producido muerte y sufrimiento como ninguna otra lo había causado.
Pero si vamos un poco más atrás en el tiempo, la cosa se pone un poquillo difícil. Si en el siglo XIX le habláramos a un obrero de Manchester acerca de las bondades de la Democracia, nos diría que todas esas cosas están muy bien, pero lejanas a su comprensión y apartadas de su cruda realidad: horas interminables de trabajo; sueldo misérrimo tan solo encaminado a su reproducción y mantenimiento hasta que la merma de facultades físicas y mentales hicieran inviable la continuación de su explotación y obligaran a su sustitución por un proletario más joven, NIÑO a ser posible (véase la minería inglesa, p.e.) para irle metiendo en vereda por poco dinero.
El siglo XIX produce ideas que conforman el Marxismo (Marx y Engels), el Socialismo Utópico (Saint-Simon, Fourier), el Anarquismo (Bakunin, Proudhom), etc., todo dicho de forma muy sumaria, perdón por ello. Pero esas ideas NO NACEN DE LA NADA, sino de la evidencia, por parte de personas sensibles, de la salvaje explotación del hombre por el hombre. Durante el siglo XX llega la ocasión de llevar a cabo la práctica del socialismo, y con todos los desastres que ese intento ha producido (sería absurdo negar las atrocidades estalinistas, maoístas, de los jemeres, etc.), me niego a pensar (también sería absurdo) que muchas de las personas que han tratado de conformar ese mundo lo hayan hecho por maldad.
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Dos desacuerdos Víctor : el primero es que el nazismo no produjo más muertes que el estalinismo. Si bien ambos sistemas son deleznables, el carnicero de Stalin mató a más gente que el loco de Hitler. Del primero ya se han encargado muchos de blanquear sus horrores, hasta que vino Kruschev a permitir el revisionismo histórico para que la Humanidad supiera las barbaridades del padre de la Urss, fuera de la propaganda que también manejan los comunistas. Del segundo, no sé si quedara algún detalle por descubrir pero que el sionismo, con buena lógica. se ha encargado de denunciar y mantener el conocimiento de sus atrocidades. Creo que ha sido la enorme difusión de este último lo que ha empequeñecido al anterior. Pienso que, en una carrera de bárbaros y salvajes, el tirano ruso gana con comodidad.
Respecto a las bondades del socialismo y comunismo como respuesta al capitalismo salvaje del siglo XIX, se amortizaron en el siglo XX, con la humanización del trabajo. A partir de ahí, debió de pasar a los libros para conocerlos como movimientos sociales que pararon la explotación de las personas en todos los aspectos de su vida. Los tratamientos médicos -como sabes- se aplican mientras que haya enfermedad para desaparecer cuando han curado el mal. Desde la caída del muro de Berlín, en la medianoche del 9 al 10 de noviembre de 1989, que puso al descubierto » el paraíso comunista «, esta ideología debería de estar muerta y enterrada en los tomos de ensayo político.
Esta polémica me parece interesante y nos enriquece a los dos. Gracias por tu comentario, Víctor. Un abrazo.
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