La desinformación, hay que entenderla como esa información errónea que se da, generalmente, de manera intencionada, nadie negará que está de rabiosa actualidad. Aunque no es un asunto nuevo o reciente, si lo ponemos en perspectiva, nos podemos encontrar con la primera ola de desinformación como fue la generada por la Rusia roja -por no querer ir más lejos en el tiempo- después de la revolución bolchevique hasta los comienzos de la era internet. Sin olvidar los tiempos de la Guerra Fría, después de la Segunda Guerra Mundial, con una sofisticación tecnológica cada vez mayor.
Nacida como la realización de una utopía libertaria muy en la línea de los sueños emancipadores antiautoritarios de la Revolución francesa de mayo de 1.968, con la actual época del ciberespacio ha resultado algo muy distinto porque la capacidad de manipulación se ha visto potenciada como nunca se había imaginado.
Internet presenta la plataforma ideal para un ataque masivo y directo a las democracias liberales y adelanta una innovación radical que dinamita las condiciones mismas de la confianza, el diálogo y la disposición a entender y asimilar lo nuevo. Esta cámara de eco, con una capacidad en cascada de difusión en red, hace que sea muy difícil distinguir entre la apariencia y la verdad.
Hoy, existen numerosas tácticas empleadas por poderes, organizaciones y colectivos para confundir a la opinión pública y generar así una interesada situación de desorden. La tupida red conformada por las actuales estrategias de desinformación resulta tan envolvente, de una apariencia tan absoluta que deja poco margen para el pensamiento reflexivo.
Parece que en estos tiempos que vivimos, hay dos tipos de verdad: la basada en el análisis objetivo de la realidad y que no es más que la verdad de siempre, la de toda la vida; y la que surge de la creencia. A tenor de lo que estamos viendo en el panorama político español, parece que la segunda definición ha terminado por vencer a la primera.
La desinformación supone asumir que existe una verdad irrefutable que sirve de referente y una versión deformada de ella que pretende manipular a la opinión pública. En cierta medida es lo que se entiende por posverdad y que no es más que una realidad distorsionada. Pero la verdad ha dejado de ser algo cierto para pasar a su condición de realidad flotante, sin raiz, plegada sobre sí misma.
Con el triunfo de internet y de las redes sociales, los fabricantes de información ya no son grandes estructuras de poder que buscan confundir a las indefensos ciudadanos. La emisión de información se ha deslocalizado, las verdades se construyen colectivamente y sin necesidad de ocultarse. Un ejemplo claro y sencillo sería el negacionismo surgido a propósito del virus chino.
La composición de verdades se ha vuelto permanente y ya no se puede achacar a un país o a un organismo estatal determinado. Además cuando esta producción de información es colectiva, la diferencia entre el que engaña y el engañado es muy difusa. Al fin y al cabo, es una parte importante de la sociedad la que elige sus propias creencias, sin que exista una fuerza exterior que la obligue a aceptar determinadas concepciones. Por eso, en esta sociedad de las creencias, las verdades de cada uno no se discuten porque no están en tela de juicio. Son lo que son y no hay nada más que hablar.
Asuntos Policiales 
Amigo Juan Francisco, está claro que las redes sociales han revolucionado todo tipo de informaciones, y desde luego tenemos para todos los gustos, ya que manipulan las verdades, dando cada uno la versión interesada que más le interesa.
Esto unido a la falta de interés por parte de una gran mayoría de gente, que sólo se informa a través de los medios que son parciales y de acuerdo con sus preferencias, dan lugar a un caos sobre la realidad, que produce unos efectos contradictorios, y una falta de rigor sobre la verdadera situación que se refiera a una cuestión en particular.
Creo que todo tiene una parte mala y otra buena, la mala es que si hablamos de política, los grupos comunistas en sus comienzos, se sirvieron de las redes sociales en las que se mueven muy bien, debido a que les sobra tiempo al no trabajar demasiado, han ido manipulando a sus simpatizantes, con unas mentiras que han calado en sus mentes, ya que les han dicho lo que querían oír, siendo mentira la mayoría de las veces.
La parte buena es que de la misma manera que han manipulado la información a su favor, éstos mismos medios de información en las redes sociales, han dejado al descubierto que lo importante para ellos era situarse en el poder y beneficiarse económicamente, sin importarle nada más que su situación personal.
Vivimos unos tiempos en los que estamos totalmente influenciados y controlados, en los que ya no podemos prescindir de la informática que está presente en todo lo que nos rodea, y que reconozco que ha sido un paso gigantesco en nuestro mundo actual, pero que como todo en la vida tiene sus partes negativas, por el mal aprovechamiento delictivo que a veces nos perjudica enormemente.
Me ha gustado tu artículo muy bien documentado, como todos los que escribes en tu blog, recibe un fuerte abrazo de tu amigo Fernando.
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No se me ocurre nada que pueda añadir a lo que tu has manifestado con plena lucidez. Me parece una gran reflexión sobre la constante manipulación informativa de la que somos objeto.
Gracias por tu comentario, Fernando. Un abrazo.
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Hay gente que cree que la desinformación es un arma cargada de falsedades, y hoy en día, al menos en España, no es así. Un axioma fundamental en la Desinformación Política es no ocultar jamás la verdad, pero ofrecerla de manera “conveniente”. De una noticia (en aquel caso desfavorable al gobierno de Pedro Sánchez) no recuerdo ahora su contenido, pero sí su continente: venía en letras gordas en la portada de la mayoría de diarios de tirada nacional… excepto en uno. En este SE OFRECÍA TAMBIÉN, pero en un espacio mucho más reducido y no en portada sino ¡en la página 19! Otra forma de desinformar, sin faltar a la verdad, es ATIBORRAR al ciudadano de información desde multitud de frentes, de tal manera que le produzca desorientación. En este sentido, las noticias relativas a las vacunas, y antaño la situación de los hospitales, son un claro ejemplo: llega el momento en que una política errónea en la vacunación, o en el trato a los enfermos, se camufla dentro del desbarajuste general.
Un “acierto” del Gobierno central (ya el hecho de que yo caiga en esa trampa, de precisar lo de “central”, es un acierto aparente de los manipuladores) ha sido, ante el estupor de quienes vemos un poco más allá del horizonte, el TROCEAR los resultados de la pandemia en 17 partes, la correspondiente a las comunidades, e informar así de resultados POSITIVOS Y NEGATIVOS según de la que se trate. Si con suerte caen los números rojos una y otra vez en las de la oposición… ¡bingo! Siempre serán esas comunidades las responsables de las cifras de muertos “y muertas”, especialmente si escondemos con desesperación las cifras globales para toda España. Es la famosa COGOBERNANZA: tú te llevas los palos, y yo las medallas. Y la oposición, alegremente, ha entrado en el juego, un juego tan injusto, absurdo y pueril que, en ocasiones, viendo las cadenas “afines”, especialmente la Sexta, nos parecía ver los resultados de la Liga de fútbol o el mapa de tiempo por comunidades. Y siempre, repito, procurando pasar las cifras totales… a una página interior, y en letra pequeña.
Con lo fácil que hubiera sido para la oposición, desde el primer día, no aceptar ese juego, descartar la cogobernanza y obligar al Gobierno a ofrecer, día a día, EXCLUSIVAMENTE, las cifras de contagios Y DE MUERTOS en todo el Estado. «Vamos, usted cánteme los datos del INEM, y deje la cogobernanza en el despacho de Iván Redondo». Un reflejo de esa política de desinformación y desviación de responsabilidades, lo hemos tenido con la GUERRA furibunda declarada al Gobierno de la Comunidad de Madrid. Claro que, en este caso, la paloma les ha salido cuca, como dicen en mi pueblo.
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Comparto contigo las líneas generales en las que descansa tu reflexión y aunque podrías haber mencionado alguna más, me parece lleno de contenido y bastante ejemplar. Lo bueno y breve……
Gracias, Víctor por tu comentario. Un abrazo.
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Muy oportuno y de plena vigencia tu estupendo artículo que nos debe hacer reflexionar sobre los vulnerables que somos y como una maquinaria de publicidad puede tambalear no sólo nuestras costumbres, habitos y preferencias en temas relativamente intranscendentes como puede ser la moda, el consumo etc sino que puede ir mucho más allá en el sentido que puede trastocar nuestros principios y más íntimas convicciones en el ámbito politico, moral y hasta religioso…
Solo basta que esas enormes plataformas creadoras de opinion con sus adlateres debidamente”engrasados “, se lo propongan.
En España estamos viviendo ese ejemplo de una forma evidente.
Como entender si no La mansedumbre de un país que no se revela ante una pésima gestión que ha propiciado miles de muertos y sin embargo es capaz de tomar la calle y provocar altercados públicos por la muerte de un simple perro?
Cómo entender si no que los responsables de esta pésima gestión sigan conservando con una merma mínima la intención del voto?
Cómo entender si no que la opinión pública no se rebele ante la forma dictatorial en que este gobierno está invadiendo las instituciones?.
Cómo entender si no que los trabajadores y las clases más desfavorecidas
Tampoco se rebelen ante la evidencia de las colas del hambre y destrucción de los puestos de trabajo?
Cómo entender sino que auténticos menesterosos, separatistas, terroristas Y criminales de todo orden estén al frente del gobierno y de las instituciones?.
Cómo entender sino que una monarquía a la que mayoritariamente apoya la población haya sufrido un desgaste tan alarmante y y un deterioro de su imagen por acontecimientos que en otra coyuntura se hubieran pasado por alto?
La respuesta es evidente y muy sencilla; la manipulación, los mensajes que se envían desde los distintos medios de comunicación social, la violencia ejercida contra el que piensa distinto etc etc,Todo ello contribuye a crear un clima favorable a quienes usan estas prácticas de información y adoctrinamiento que impactan en, por lo general, las personas más desinformadas por sus carencias culturales y débil espíritu crítico
Un abrazo y feliz domingo amigo Juan….Magnífico artículo del que tanto se podría seguir hablando
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Creo que te ha salido un artículo mejor que el mío, con muchos y variados ejemplos. Comparto contigo la utilización descarada de este Gobierno para intentar salir indemne de esta enorme crisis que nos está asolando, a base de una estrategia clara de desinformación, increíble para los tiempos que nos ha tocado vivir. Para intentar comprender mejor esta interesada paz social, yo añadiría a lo que tú tan bien has expuesto que el agitador-jefe está con el Gobierno y apenas hace unas semanas en el Consejo de Ministros y la larga lista de subvenciones públicas a los movimientos sociales para que se estén quitecitos y miren para otro lado.
Gracias por tu comentario, Antonio. Un abrazo.
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Es una práctica manipuladora en las comunicaciones política y las relaciones internacionales.
La desinformación, ahora conocida como noticias falsas o directamente con el anglicismos «fake news», ha contaminado el discurso público durante siglos , incluso milenios. En esta era se ha ampliado como un arma de terroristas, hostigadores de la mafia y grupos de presión, que intentan desestabilizar en su beneficio los procesos electorales poara ampliar así las fisuras sociales, subvertir la democracia y, en algunos casos, impulsar los regímenes totalitarios
Hoy existen herramientas potentes con nombres de sobra conocidos: Facebook, Twitter y Google, gigantes bajo presión para tomar medidas.
No se debe confundir información de engañar o manipular, con información errónea, que por muy errónea que sea no cuenta con la misma intención.
Los principales creadores de noticias falsas han sido históricamente los Estados. En las dictaduras parecen más fácilmente identificables sus señales.
Con el avance de la tecnología han irrumpido en el último años los llamados deepfakes: vídeos o clips de audio en los que mediante machine learning las máquinas son capaces de poner la cara de una persona concreta y en el cuerpo de otra. Resulta estremecedor ver a Bill Hader convertirse en Tom Cruise o en Arnold Schwarzenegger.
A mi concretamente, ciudadano de a pie, que no soy importante, ni famoso, me cambiaron mi cara por un señor desconocido en mi cuenta muro de Feistuck o Facebook, denuncié a Facebook España, me remitieron a la dirección en Irlanda, escríbí a su abogado o representante legal, no he podido recuperar mi foto rostro con gafas oscuras de sol, en una cafeteria en Santiago de la Ribera,
Además por casualidad, pude interceptar dos correos electrónicos IP franceses en mi correo electrónico, Microsoft me avisó que si era yo o un tercero falso, por error, pinché aceptar, toda vez que mi esposa estaba en otra habitación con otro ordenador, creyendo que era ella, de esta forma capturé los dos correos que terminaban odesinencia fr. vamos: franceses o colocados por un robot informático de un presunto hacker o delicuente ciberdelicuencia, Pedí un peritaje a un informático judicial, presenté denuncia, luego con abogados y esta pendiente de una requisitoria que
el Juez, me aceptó, como prueba anticipada, sin «abogado » ni «procurador» requisitoria que la Brigada delitos tecnológicos envió a una operadora TISCALI en Francia, dado el tiempo transcurrido me temo que se trato de un robot o incluso un antivirus VPN que te cambia la dirección IP al país que uno quiera de Europa, China, Rusia o EEUU.
Con Facebook y Twitter, los modernos proveedores de desinformación solo necesitan una computadora o un smarphone y una concesión a Internet para llegar a una audiencia potencialmente enorme. No se requiere siquiera dar la cara: puede disfrazarse de alguien u otro cosa, como un movimiento de base. La tecnología permite, se pueden desplegar ejércitos de personas, conocidos como troleo y los llamados bots de Internet, software que realiza tareas automatizadas rápidamente, para impulsar campañas de desinformación a gran escala.
Una forma de propaganda, es lo que se llama troleo hecho por el Estado, cuando los gobiernos se empeñan en generar multitudes de odio digital para difamar a activistas o periodistas críticos, suprimir la disidencia, socavar a los opositores políticos, difundir mentiras y controlar a la opinión publica
Este año, diversos investigadores de la UNIVERSIDAD DE OXFORD, encontraron evidencias de «campañas de manipulación de redes sociales», por parte de gobiernos o partidos políticos en 70 países, frente a apenas 28 países en 2017.
Facebook es, como era de esperar, el principal lugar donde se difunde la desinformación. Todas las miradas y la de los investigadores de Oxford también) se dirigen generalmente hacia RUSIA. Pero también señala que CHINA, se ha convertido en «un jugador importante en el orden mundial de desinformación». Junto con esos dos países, otros cinco: India, Irán, Pakistán, Arabia Saudita y Venezuela, han utilizado Facebook y Twitter «para influir en el público en general.
Internet y las redes sociales son un foco o herramienta muy importante para manipular la información, y hacernos creer como en la época de Hitler, que un infierno es un paraíso o un paraíso un infierno, desvirtuando la verdad a gusto del desinformador o grupo político de poder, en este caso de la Alemania nazi.
La división de YouTube de Google también asegura haber ajustado los algoritmos que deciden los vídeos que se van a ver a continuación para limitar las recomendaciones de presuntos vídeos falsos o inflamatorios, un movimiento al que se había resistido durante años, la concenciación cada día más de los medios de comunicación de controlar NOTICIAS FALSAS O BULOS, PARA NO CONFUDIR A LA OPINIÓN PÚBLICA, ES CADA VEZ, MAS
NECESARIA.
WhatsApp, filia de Facebook, limita a cinco a las personas o grupos a los que se puede reenviar un mensaje. Su empresa pasó 18 meses preparándose para las elecciones de la India en 2019: bloqueó y eliminó cuentas falsas, buscó intentos de intromisión y se asoció a verificadores externos, para combatir las llamadas FAXE NEWS.
Vamos a tener que hacer cursos de ANTI HACKER, o contratar a un verdadero hacker al caso, para investigar porque razón si no soy político, rico o persona importante, ¿quién me tiene fobia o mania? algún directivo o informático de la antigua CAJAMURCIA, donde se personaron una pareja de la Brigada Delitos Tecnológicos dieron con el Ordenador, IP, Teléfono de CAJAMURCIA, estos negaron los hechos o no quisieron investigar qué a horas no lectivas, un operador informático o alto directivo, creyendo que uno era tonto o imbécil, no iba saber quién era, o iba a poner una demanda civil como Quijote ante molinos de viento, pues va a ser que no.
Utilizaban un programa informático ANONIMOUS, un teléfono cable ONO, identidad falsa y de Baja, y el otro, al
tonto del bote el informático o directivo de CajaMurcia, que utilizaba un llave maestra para no dejar Pasword o contraseña, pero las difamaciones en dos páginas web. http://www.laislavirtual.com con sede en Canarias, y la otra
http://www.negligenciasmedicas.com con sede en Madrid, estuvieron buen número de años que me sonrojo y no
me atrevo a decirlo esto era Moobing o Acoso Inmoral en el Trabajo, aprovechándose que soy padre de dos hijas y nieto, y de mi esposoa , cinco miembros, entonces mi economía boyante.
Ahora actúan más sibilinamente, en mi operadora al cambiar de teléfono móvil, descubrí que aparece con
nacionalidad AFGANISTÁN, el domicilio conyugal el de bufete de mis abogados, así que pidieron disculpas en la Consejería de Educación, al enviarles un Buforax, me pidieron excusas, luego los ordenadores de CORREOS,, un buen día se apagaron al poner mi número de DNI, me mandaron a la estafeta de correos El Corte Inglés allí pasó
los mismo.
SABE QUE LES DIGO. QUE EL CRIMINAL NUNCA GANA, Y AL FINAL PAGA SU DELITO.
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Creo que has sido una víctima muy clara de un ataque de desinformación para perjudicarte en un caso y para intentar conseguir tus datos personales en otro. Estamos en la era de internet y aquí los bulos y las noticias falsas corren que es un primor. Hay que estar siempre en alerta cuando recibimos cualquier cosa por las redes sociales porque no sabemos realmente lo que puede contener y si nos van a engañar. A veces, el precio que pagamos por nuestros errores es muy alto.
Gracias, Juan por tu comentario. Un abrazo..
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